Ir directamente al contenido
➤ ENVÍOS GRATIS Y SÚPER RÁPIDOS (pedidos +49€*)
Ser VIP son TODO VENTAJAS 💎 ¡Apúntate YA!
Cambios y devoluciones gratuitas (30 días)
⭐⭐⭐⭐⭐ Confianza que se siente | +5,600 clientes satisfechos nos avalan
🤍 Llévate un Regalo a elegir GRATIS en compras +60€ 🛒

¿Tu hijo duerme lo suficiente? Hablemos sin presión sobre las horas de sueño.

¿Tu hijo duerme lo suficiente? Hablemos sin presión sobre las horas de sueño.
Una de las mayores preocupaciones de los padres es si su bebé duerme lo suficiente. Te contamos cuántas horas de sueño recomiendan los pediatras para cada etapa, desde recién nacidos hasta los 5 años, y te damos consejos prácticos para crear una buena rutina que ayude a toda la familia a descansar mejor.  

¿Tu hijo duerme lo suficiente? Hablemos sin presión sobre las horas de sueño.

Vivimos en una sociedad que aplaude la productividad. Nos pide hacer más, llegar a más, ser más... y en esa carrera, el descanso se ha convertido en un lujo, casi en un acto de rebeldía. Poco se cuida y poco se habla de la importancia de dormir lo suficiente. Y cuando nos convertimos en padres, esta presión se multiplica, generando una de las dudas más universales y angustiantes: ¿estará mi hijo durmiendo lo que necesita?.

Si alguna vez te has encontrado a las 2 de la madrugada buscando en Google cuántas horas debe dormir un bebé de 3 meses, queremos compartir contigo la información que hemos investigado para poner un poco de luz en este tema. Vamos a hablar de las horas de sueño recomendadas, pero siempre desde la calma. Porque cada bebé es un universo, y aunque las tablas de sueño son útiles, tu instinto y la observación de tu peque siempre serán la mejor guía.


Orientación por edades.

Para empezar, es útil tener una referencia. Asociaciones como la Asociación Española de Pediatría (AEPED) y otras academias del sueño a nivel mundial establecen unos rangos de sueño recomendados (contando siestas y sueño nocturno) que nos pueden servir de orientación.

Aquí te los resumimos de forma sencilla:

- Recién nacidos (0-3 meses): entre 14 y 17 horas diarias.

- Bebés (4-11 meses): entre 12 y 16 horas al día.

- Niños pequeños (1-2 años): entre 11 y 14 horas al día.

- Preescolares (3-5 años): entre 10 y 13 horas al día.

(Para los más mayores, los escolares (6-13 años) necesitan de 9 a 11 horas, y los adolescentes (14-17 años) entre 8 y 10 horas).

Es fundamental recordar que estos son rangos. Habrá bebés que necesiten un poco más y otros que con un poco menos estén perfectamente.


Por qué un sueño reparador es innegociable

Respetar estas necesidades de sueño no es un capricho. Dormir bien en la infancia está directamente relacionado con casi todos los aspectos de su desarrollo:

- El desarrollo cerebral y emocional: Durante el sueño, su cerebro procesa todo lo aprendido y consolida la memoria.

- El funcionamiento del sistema inmunitario: Un buen descanso fortalece sus defensas.

- El equilibrio del estado de ánimo: La falta de sueño es una de las principales causas de irritabilidad e hiperactividad.

- El rendimiento en el aprendizaje y la capacidad de atención.

- La regulación del apetito y del crecimiento físico.


Cómo podemos ayudarle a dormir lo que necesita.

Más que obsesionarnos con el reloj, podemos crear un entorno y unas costumbres que inviten al descanso. Establecer una rutina de sueño consistente es la herramienta más poderosa que tenemos.

1- Crear un ritual relajante antes de dormir. Un baño templado puede ser el pistoletazo de salida para bajar revoluciones. El momento de secarle, ponerle el pijama y envolverle en un poncho-toalla suave puede ser un ritual de mimos y calma. Después, un cuento o una canción suave ayudan al niño a asociar esos momentos con la tranquilidad del sueño.

2- Fijar horarios regulares (dentro de lo posible). Intentar acostar y levantar al niño más o menos a la misma hora cada día (fines de semana incluidos) ayuda a regular su reloj biológico.

3- Introducir un objeto de apego. A partir de cierta edad (cuando ya son capaces de moverse y girarse por sí mismos), muchos bebés adoptan un "amigo" para dormir. Un doudou o peluche suave como el conejito de Babyono puede convertirse en ese objeto de apego que les da seguridad y les ayuda a conciliar el sueño por sí mismos cuando se despiertan a mitad de la noche.

4- Evitar pantallas y mucha estimulación antes de dormir. La luz azul de las pantallas interfiere directamente en la producción de melatonina (la hormona del sueño). Es recomendable apagar los dispositivos al menos una hora antes de ir a la cama y optar por juegos tranquilos.

5- Asegurar un ambiente tranquilo y seguro. Silencio, poca luz y una temperatura agradable son fundamentales. Para los bebés, sentirse seguros en su cuna es clave. Un saco de dormir es una solución fantástica, ya que les mantiene abrigados de forma segura, sin riesgo de mantas sueltas, y les permite moverse con libertad.


¿Cuándo es buena idea consultar con el Pediatra?.

Si, a pesar de todo, sientes que el sueño de tu hijo es un problema constante o te genera mucha angustia, conviene hablar con su médico. Especialmente si presenta alguno de estos síntomas:

- Tiene grandes dificultades para conciliar el sueño cada noche.

- Se despierta muchísimas veces.

- Tiene pesadillas frecuentes o terrores nocturnos.

- Muestra signos evidentes de cansancio durante el día (ojeras, irritabilidad).

- Ronca de forma persistente y fuerte.


Confía en tu Instinto (y en el de tu Bebé).

El sueño es un proceso madurativo. Habrá regresiones, noches toledanas y días en los que pienses que nunca volverás a dormir ocho horas seguidas (y puede que tardes un tiempo, para qué engañarnos). Pero pasará.

Usa esta información como una referencia, no como una ley inquebrantable. Lo más importante es que conozcas a tu bebé, respondas a sus necesidades y te permitas ser flexible.

Al final, la maternidad se trata de esto: de observarles, de preocuparse y de aprender cada día. Tener información fiable te da la tranquilidad necesaria para poder disfrutar de lo que de verdad importa: el increíble viaje de verles crecer. En babyTop, compartimos esa misma filosofía.

Volver al blog
Te gustará